O lo que es lo mismo: la primera vez que me rompieron el corazón. Todo sucedió durante el mundial de México 86. Yo tenía 6 años (ash no hagan cuentas ok?) y de pronto vi como mi papá era totalmente absorbido por 23 tipos corriendo sobre una cancha verde persiguiendo un balón. En realidad no entendía mucho a que se debía tanta enajenacion, mas bien solo queria saber cuando acababa. Asi que un dia, le pregunte: ¿cuando se acaba el mundial?
– En 2 semanas
– Ah, ¿y despues que sigue?
– La serie mundial
– Mmm, o sea ¿beisbol?
– Si
– ¿Y luego?
– Ah pues esa dura mucho, y tambien podemos seguir Wimbledon.
– Mmm, tennis, ¿verdad?
– Si
– Ok papa, te veo el proximo año, ¡buah!